El verano es una época del año que muchas personas esperan con ansias. Es la temporada ideal para disfrutar del sol, las playas, las montañas y una amplia gama de actividades al aire libre. Sin embargo, junto con todas estas actividades emocionantes, también llega un aumento en la incidencia de lesiones. 

En este artículo, veremos las lesiones más comunes en verano, cómo prevenirlas y qué hacer en caso de que ocurran.

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Lesiones por sobreesfuerzo y deshidratación

Una de las lesiones más comunes en verano son las relacionadas con el sobreesfuerzo y la deshidratación. Durante los meses calurosos, las personas tienden a ser más activas físicamente. Esto incluye actividades como correr, hacer senderismo, nadar, jugar al fútbol o al voleibol de playa, y muchas otras. Aunque estos ejercicios son excelentes para la salud, cuando no se realizan con precaución pueden llevar a lesiones por sobreuso.

Causas y prevención

El sobreesfuerzo ocurre cuando el cuerpo se somete a más actividad de la que puede manejar sin un descanso adecuado. Esto puede resultar en lesiones como esguinces, torceduras, y tendinitis. La deshidratación, por otro lado, es el resultado de no reponer los líquidos que se pierden a través del sudor. Para prevenir estas lesiones, es crucial:

• Calentamiento y enfriamiento: Siempre comenzar con un calentamiento adecuado antes de cualquier actividad física y terminar con un enfriamiento para ayudar a los músculos a recuperarse.
• Hidratación: Beber suficiente agua antes, durante y después del ejercicio. Evitar el consumo excesivo de alcohol y cafeína, ya que pueden contribuir a la deshidratación.
• Descanso: Escuchar a tu cuerpo y no sobrecargarlo. Tomarse días de descanso para permitir que los músculos se recuperen.

Quemaduras solares y daños en la piel

El sol es una de las mayores atracciones del verano, pero también puede ser uno de los mayores peligros. La exposición prolongada a los rayos ultravioleta (UV) del sol puede causar quemaduras solares y, a largo plazo, aumentar el riesgo de cáncer de piel.

Causas y prevención

Las quemaduras solares ocurren cuando la piel se daña por la exposición excesiva a la radiación UV. Los síntomas incluyen enrojecimiento, dolor, ampollas, y, en casos graves, fiebre y escalofríos. Para prevenir las quemaduras solares y otros daños en la piel:

• Protector solar: Usar un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30. Aplicarlo generosamente y reaplicarlo cada dos horas, o después de nadar o sudar.
• Ropa protectora: Usar ropa de manga larga, sombreros de ala ancha y gafas de sol para protegerse del sol.
• Evitar las horas pico: Limitar la exposición al sol entre las 10 a.m. y las 4 p.m., cuando los rayos UV son más intensos.

Lesiones acuáticas

El agua es una de las mayores fuentes de diversión durante el verano, pero también puede ser peligrosa. Las lesiones acuáticas son comunes y pueden variar desde cortes menores hasta ahogamientos.

Causas y prevención

Ahogamientos: Ocurren cuando una persona no puede mantenerse a flote y respirar debido a la inmersión en agua. Para prevenir ahogamientos:

• Supervisión: Nunca nadar solo y siempre supervisar a los niños cerca del agua.
• Natación: Aprender a nadar y conocer las técnicas de salvamento básico.
• Chalecos salvavidas: Usar chalecos salvavidas adecuados en actividades acuáticas.
• Cortes y raspones: Pueden ocurrir al pisar objetos afilados en el agua o en la playa. Para prevenir estos accidentes:
• Calzado adecuado: Usar sandalias acuáticas o zapatos de agua.
• Inspección del área: Antes de entrar al agua, asegurarse de que el área esté libre de objetos peligrosos.

Lesiones deportivas

El verano es la temporada de muchos deportes al aire libre, incluyendo fútbol, béisbol, voleibol de playa y ciclismo. Aunque son actividades recreativas divertidas, también pueden causar una variedad de lesiones.

Causas y prevención

Esguinces y Torceduras: Estos son comunes en deportes que implican correr, saltar o cambios bruscos de dirección. Para prevenir:

• Calzado adecuado: Usar zapatos que brinden buen soporte.
• Entrenamiento y técnica: Aprender y practicar técnicas adecuadas de juego y entrenamiento.
• Fracturas: Ocurren por caídas o impactos directos. Para prevenir:
• Equipo de protección: Usar cascos, rodilleras, coderas y otros equipos de protección según el deporte.
• Superficies seguras: Asegurarse de que el área de juego esté libre de obstáculos y en buenas condiciones.

Picaduras de insectos y reacciones alérgicas

Durante el verano, el aumento de la actividad al aire libre también trae consigo un mayor riesgo de picaduras de insectos como mosquitos, abejas y avispas. Estas picaduras pueden causar reacciones alérgicas, algunas de las cuales pueden ser graves.

Causas y prevención

Las picaduras de mosquitos, pueden causar enfermedades como el dengue, zika y chikungunya. Para prevenirlo, debes hacer lo siguiente:

• Repelentes de insectos: Usar repelentes de insectos en la piel y ropa.
• Ropa protectora: Usar ropa de manga larga y pantalones largos.
• Evitar áreas de alta concentración de mosquitos: Como aguas estancadas y bosques densos.
• Picaduras de abejas y avispas: Pueden causar dolor intenso e hinchazón. En personas alérgicas, pueden desencadenar una reacción anafiláctica. Para prevenir:
• Evitar perfumes y colores brillantes: Que atraen a estos insectos.
• Mantenerse alejado de los nidos: Si se detectan nidos de abejas o avispas, evitar la zona y contactar a un profesional para su remoción.

Lesiones en viajes

El verano también es una temporada popular para viajar, lo que aumenta el riesgo de lesiones relacionadas con accidentes de tráfico y caídas.

Causas y prevención

• Accidentes de tráfico: Para prevenir accidentes durante los viajes por carretera:
• Descanso adecuado: Evitar conducir cuando se está fatigado.
• Cinturones de seguridad: Asegurarse de que todos los pasajeros usen cinturones de seguridad.
• Planificación de la ruta: Conocer la ruta y evitar distracciones mientras se conduce.
• Caídas y resbalones: Son comunes en lugares desconocidos y pueden resultar en lesiones graves. Para prevenir:
• Calzado adecuado: Usar zapatos cómodos y antideslizantes.
• Precaución: Ser consciente del entorno y moverse con precaución en terrenos desconocidos.

Como ves, el verano es una época maravillosa para disfrutar de una amplia gama de actividades al aire libre, pero también conlleva ciertos riesgos. Las lesiones más comunes en verano incluyen aquellas por sobreesfuerzo, deshidratación, quemaduras solares, lesiones acuáticas, deportivas, picaduras de insectos y lesiones relacionadas con viajes. 

La prevención es clave para disfrutar de un verano seguro y saludable. Mantenerse hidratado, usar protector solar, practicar deportes con precaución, y estar atento a los peligros del entorno puede hacer una gran diferencia. 

Recuerda siempre escuchar a tu cuerpo y tomar las precauciones necesarias para evitar lesiones y disfrutar al máximo de esta estación.